Raza: pitbull terrier americano
Origen: Gran Bretaña
Clasificación: pitbull
Tamaño De 38 a 48 cm en los machos y de 35 a 45 cm en las hembras
Expectativa de vida De 8 a 15 años
Peso Entre 15 y 28 kg en los machos y entre 14 y 23 kg en las hembras
Características físicas
Con una altura a la cruz de entre 38 y 48 centímetros y un peso que oscila de los 15 a los 28 kilos, se trata de un perro mediano con una corpulencia atlética que le confiere una imagen espectacular.
Su cabeza: es larga, ancha y poderosa, pero ha de estar proporcionada en relación al cuerpo. Si la ves desde arriba o desde los laterales, su forma tiene que ser la de cuña. De frente ha de ser redonda y con una anchura que equivale a dos tercios de la anchura de los hombros.
Su stop: es moderadamente definido. Sus ojos, que miran atentamente y son redondos, deben situarse en la parte baja de la cabeza, admitiéndose todos los colores, excepto el celeste. Sus mejillas son abultadas. Sus orejas, de inserción alta, han de ser rectas y en forma de rosa.
Su mandíbula: tiene que encajar bien en forma de tijera. Respecto a la poderosa mordida de esta raza han corrido ríos de tinta y no pocos mitos. De ella se dice que el pitbull americano no puede soltar a su presa porque sus quijadas se traban y que son la raza con la mordida más potente, leyendas que distorsionan la imagen de esta noble raza
Su cuerpo: es extremadamente llamativo, como lo es su cabeza. Esto no quiere decir que sea demasiado ancho ni voluminoso. El estándar del United Kennel Club establece que lo que ha de ser es ligeramente más largo que alto. El tórax ha de ser estrecho y profundo, bastante bien moldeado, valorándose su capacidad para dilatarse y contraerse.
Su cuello:debe lucir músculo desde la base hasta el cráneo y su lomo tiene que ser fuerte y corto. Su parte anterior ha de ser fuerte, sólida y pesada. Sus codos son fuertes y planos. Su parte posterior debe contar con una cadera ancha y larga, que le permita una buena aceleración.
Su cola: no es demasiado gruesa en la base, es larga y acaba en punta, con un porte bajo. El movimiento de este extraordinario perro es ligero, sin dejar en ningún momento de mostrar su fuerza. Su piel es gruesa y no tiene pliegues. Se pega al cuerpo en todos los lugares, salvo en el tórax y en el cuello, lugar en el que puede formar una ligera papada.
Cuidados
Los perros pitbull, por su complexión y musculatura, son perros que necesitan hacer mucho ejercicio físico. Les encanta el ejercicio fuerte y además lo necesita, correr como mínimo entre 30 y 45 minutos diarios para un pitbull es una necesidad. Lo ideal es, si no tienes tiempo para sacarle a correr, utilizar una cinta de ejercicio.
Mientras el pitbull es cachorro deberemos tener precaución con el ejercicio ya que no conviene cansarle mientras está en pleno desarrollo.
Para tener nuestro pitbull en perfectas condiciones debemos realizar una serie de rutinas diarias: Disciplina Ejercicio Físico Ejercicio Mental Cepillado de pelo Cepillado de dientes Visitas para revisión y vacunas al veterinario El baño (solo cuando lo necesite)
La alimentación de tu cachorro Pitbull
Imagina a un humano comiendo alimentos de baja calidad cómo la comida basura durante años y a otro comiendo alimentos saludables y equilibrados durante años. ¿Cuál vivirá más tiempo? ¿Cuál tiene mejor salud? ¿Cuál tendrá menos enfermedades a lo largo de su vida? Pues lo mismo sucede con los perros.
Al igual que en otras razas, hasta aproximadamente el mes y medio o dos meses de vida los cachorros se alimentan a base de leche materna, aunque a partir del mes ya pueden empezar a comer parte de alimentos sólidos.
Si, por algún motivo, no has tenido más remedio que adoptar a un pitbull lactante, se recomienda darle leche maternizada específica para perros, que está específicamente formulada para la especie canina y es más aconsejable que la leche de vaca o la de cabra.
Iniciación al alimento sólido
A partir del mes de vida, mientras sigue tomando leche, puede empezar a presentarse al animal pienso seco o alimento húmedo, específico para cachorros jóvenes, y ver la reacción del animal, pero sin forzarle a comer. Con dos meses de vida, el cachorro ya debería haber dejado la leche y empezado a comer pienso. Al principio puede ser de ayuda mojar el pienso con agua o caldo (sin cebolla y sin sal) para que lo encuentre más cómodo de ingerir o más apetecible, aunque esto no suele ser necesario.
Pienso o croqueta
A partir de entonces, y hasta aproximadamente el año de vida del animal debe proporcionarse un pienso específico para animales jóvenes o cachorros, para perros de raza mediana o mediana/grande (esto varía según la marca de pienso), y seguir las indicaciones del fabricante en cuanto a ración diaria y frecuencia de las comidas. Lo encontraremos etiquetado como alimento para cachorros o "puppy". De todos modos, la alimentación a voluntad, también conocida como ad libitum, que implica mantener el comedero del animal permanentemente lleno, no es una mala opción en los cachorros de pitbull.
Alimentación de un pitbull adulto
En cuanto a la frecuencia y la cantidad de la comida, es importante seguir las indicaciones del fabricante. Por lo general, los perros adultos pueden alimentarse una vez al día, no obstante, en los pitbull se aconseja distribuir la cantidad de comida en dos tomas (o incluso tres), para evitar que ingieran gran cantidad de comida de una sola vez.
Pienso o croqueta para un pitbull adulto
Por otra parte, se debería suministrar un pienso específico para razas medianas o grandes, ya que, en primer lugar, tienen un tamaño de croqueta adecuado al tamaño del animal (evitando así que coman demasiado rápido) y, en segundo, están formulados para prevenir ciertos problemas que pueden aparecer en perros de gran tamaño (como por ejemplo, problemas articulares)
La cantidad que se debe suministrar a un pitbull adulto debería ser la que recomienda el fabricante del mismo, aunque puede ser algo mayor en ejemplares con una alta actividad física. Recomendamos revisar el envase del producto para asegurar que la cantidad que le ofrecemos es la adecuada.